El Canalla, con suplentes, cayó ante el Lobo y quedó a ocho puntos de la cima con nueve por disputar, por lo que ya está virtualmente afuera de la lucha por el título. El tanto tripero lo marcó Nicolás Contín a los 35 minutos del segundo tiempo.
Central resignó definitivamente sus sueños en el campeonato local. Y ahora deberá volcarse por completo a la Copa Libertadores, en la que se anidan las principales ilusiones del pueblo de Arroyito. Es que con la derrota de esta tarde ante Gimnasia de La Plata por 1 a 0, quedó a ocho puntos de los líderes del grupo 1, San Lorenzo y Godoy Cruz. Con apenas 9 unidades por jugar. Sólo la matemática, de manera muy caprichosa, impide sentenciar algo que sólo es cuestión de tiempo.
El Lobo que, con este éxito, mantiene una ilusión algo menos remota que los canallas (está a seis de la cima), se impuso merced a un tanto del juvenil Nicolás Contín, quien a los 35 minutos del segundo tiempo, capitalizó de primera un centro abierto desde la derecha e inclinó para el lado tripero un partido chato y parejo.
Gol de Contín
Fue un encuentro de notoria chatura y muy parejo. Ninguno de los dos logró imponerse con claridad. La alineación de Alfaro se exhibió siempre ordenada y jugando muy concentrada, impidiéndoles a los auriazules hacer pesar la habilidad de Delgado y Lo Celso y anulando el peso ofensivo del debutante Ijiel Protti. Lo ganó porque Contín encontró la inspiración dándole de primera a un centro enviado desde la derecha, en la única jugada clara-clara del partido.
La formación escogida por Eduardo Coudet distó mucho de la que generalmente sale a escena: sólo Sosa, Pinola, Colman y Lo Celso se contaron entre los habituales titulares, por lo que se quedaron afuera futbolistas influyentes como Cervi y Ruben arriba, o Donatti y Salazar en el fondo. Musto faltó por suspensión. Ausencias de peso que explican la floja performance de esta tarde.
Los auriazules tuvieron dos en cada tiempo: en el primero, una de Lo Celso por arriba y el centro que cabeceó Protti afuera; en el complemento, el remate de Delgado y la ocasión del final de Burgos, que la paró larga dentro del área. Pero nunca alcanzó el nivel individual ni colectivo que, por ejemplo, mostró en el Arena de Gremio hace menos de una semana.
La campaña centralista pintaba para llevarlo a pelear hasta el final la obtención de grupo 1 y, por ende, la llegada a la final del torneo, pero sufrió una abrupta caída en el tramo final. Tan es así que de la quinta fecha hasta acá, sólo ganó dos encuentros (Colon y Sarmiento); y de los últimos 24 puntos en juego, sólo obtuvo 6. Una cosecha imposible de sostener cualquier esperanza.
