El juez Villanueva dirigió el procedimiento donde se recolectó vainas servidas calibre 9 milímetros como las que usa Prefectura.
En la inspección ocular en Villa Mascardi, donde murió el joven Rafael Nahuel en un violento desalojo del grupo Albatros de Prefectura Naval, no se halló evidencia de un enfrentamiento como se sostiene desde el gobierno nacional.
El procedimiento judicial, que encabezó el juez federal Gustavo Villanueva, contó con una numerosa custodia de uniformados e incluyó la participación del padre y el hermano del joven que falleció por una bala 9 milímetros como las que usan la fuerza de seguridad.
En la zona que ocupa la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu se encontró «31 vainas servidas calibre 9 mm y un cartucho completo y 13 vainas servidas de escopeta calibre 12/70, con munición antitumulto, junto a otro cartucho completo», según publicó el diario La Nación.
La investigación se orienta a dilucidar las circunstancias de la muerte de Nahuel y de las heridas de otras dos personas, que acompañaban la toma en un terreno de Parques Nacionales, como así también si existió un tiroteo.
Al respecto en el acta de procedimiento se indicó: «No se pudieron observar impactos (de bala) en el terreno».
El magistrado deberá evaluar el informe sobre el material recolectado, la pericia balística de las vainas y el resultado de las pruebas de carbono que se practicó sobre las manos de los ocho prefectos, de Nahuel y de Fausto Jones Huala y Lautaro González.
Fuente: cba24n
