A raíz de un estudio realizado desde el Consejo Económico y Social se definió el total de la población de adultos mayores en la ciudad. En ese sentido, se puntualizó desde el organismo en la necesidad de «generar políticas públicas «, acciones concretas e instancias de participación para ese sector de la población.
En la mañana del martes se llevó adelante una conferencia de prensa desde el Consejo Económico y Social. El motivo fue la presentación de un informe que vienen realizando en los últimos meses acerca de «una temática bastante compleja», según definió el presidente del organismo, Miguel Besso, y es población de la tercera edad.
En la ciudad de Río Cuarto, la cantidad de personas que pertenecen al rango de la tercera edad, representan un 15% de la población, según lo que delimita el informe. Cabe destacar que dentro de este grupo se incluyen a todas las personas mayores a 65 años.
«Hay una extensión de la vida que implica no sólo una lectura integral de lo que está pasando sino también una acción concreta al respecto», explica Besso respecto de la importancia del estudio del tema.
Concretamente, son 28.000 personas en la ciudad de Río Cuarto las que pertenecen a este rango etario. «Hay mucho por hacer desde distintos puntos de vista, entre otras cosas, la puesta en marcha de una reforma de la cuestión legislativa en todos los órdenes, tanto Nacional, Provincial y Municipal», afirmó Miguel Besso.
Otros de los datos que arroja el informe son no menos alarmantes y es que el 40% de esta población vive sola, el 7% está solo y no tiene familia, el 29,6% dice que no le alcanza para vivir, entre otros.
«En el terreno legal hay que hacer una adaptación, porque no hay siquiera jurisprudencia. Hay que hacer una legislación integral que tenga en cuenta esta etapa de la vida, para lo cual hay que reformularla. Pero también hay aspectos a reformular desde lo social, hay un montón de programas que se pueden focalizar en la tercera edad que apuntan a resolver el problema funcional», finalizó el presidente del organismo. Y cerró contundentemente: «Es inadmisible que no veamos esta situación como algo grave».
