Tras las pérdidas registradas por los efectos de la pedrea y los fuertes vientos durante el temporal, los productores del cinturón verde comentaron que han tenido que volver a sembrar. Expresaron que la situación es difícil porque además de las pérdidas no tienen acceso a créditos. Consideran que esto trae aparejado un aumento en el precio de las frutas y verduras que ronda el 15%.
Los quinteros están preocupados porque las perspectivas climatológicas no son muy alentadoras para los próximos meses.