Un número importante de motociclistas de la ciudad de Río Cuarto se movilizaron frente al Palacio Municipal para expresar su disconformidad sobre la nueva normativa impulsada por el Ministerio de Seguridad que apunta a aumentar los controles.
Los manifestantes calificaron de ridícula a la Ley que tiene por objetivo generar mayores controles en los motociclistas y que entre esos puntos exige que los conductores y acompañantes tengan un casco con el dominio impreso y también un chale refractario con el número de patente.
La medida fue dispuesta por el Gobierno, a través de nuevos cambios a la Ley Nacional de Tránsito, para aumentar los controles y prevenir delitos cometidos por motociclistas, según indicó la propia ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Integrantes de la Agrupación Cosarios Río IV, uno de los grupos de motociclistas locales, indicaron que no están de acuerdo con la nueva ley por los siguientes puntos:
1) Las primeras víctimas de los motochorros somos nosotros porque son con nuestras motos robadas las que usan para su fin.
2) A partir de ahora también el riesgo que nos maten o secuestren para salir a robar con nuestros cascos y chalecos somos nosotros
3) Cuántos cascos y chalecos tenemos que comprar, porque hay diferentes medidas/talles según sea el acompañante.
4) Los que tenemos más de una moto que hacemos? ? Le ponemos las diferentes patentes al mismo casco o nos obliga a comprar uno por cada moto?
5) Si nos secuestran para no denunciar el robo de nuestras motos, cascos y chalecos, cómo demostramos que no éramos nosotros?
6) Las agrupaciones y moto clubes que llevamos nuestros propios chalecos identificatorios no podemos tapar nuestro parche.
6) Nosotros los dueños de motos legales somos los primeros que queremos que se hagan operativos serios para detectar motochorros.
7) Los motochorros prácticamente son fácilmente detectables. .sus motos no llevan patentes ni luces ,no usan cascos, etc.
Por último, en referencia directa a la ministra Patricia Bullrich, los motociclistas expresaron: “Antes de perseguirnos con leyes absurdas y confusas, debería beneficiarnos de alguna manera porque disminuimos los tremendos embotellamientos que ocurren a toda hora. También nos castigan con peajes exorbitantes, mientras que tendría que ser al revés porque evitamos embotellamientos y nuestras motos no dañan los asfaltos”.
