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Bebé fallecido en Arias: El fiscal pide 8 años

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En la tarde de hoy los jueces técnicos y los jurados populares decidirán sobre el futuro de la joven de Arias acusada de matar a su hija de 3 meses. El fiscal pide que se le den 8 años de prisión; la defensa pide la absolución. 

oy se espera una maratónica jornada en el juicio por jurado popular a la joven de Arias, Rebeca Abigail Ponces, que concluirá en horas de la tarde con el veredicto.

En ese contexto, se presentó espontáneamente Miriam Ramos, madre de la imputada, quien dio un duro testimonio que conmocionó a algunos miembros del jurado popular.

Sobre el mediodía daba inicio el testimonio de la psicóloga Lorena Dutto, quien examinó a Rebeca luego del fatídico suceso. A su turno, en la ronda de alegatos, el fiscal Daniel Miralles pidió 8 años de prisión para la mujer por considerar que mediaron circunstancias extraordinarias de atenuación.

En tanto, la defensa representada por Luciana Casas solicitó la absolución porque entiende que la mujer actuó en estado de conmoción. Se estima que alrededor de las 16 se conozca el veredicto.

Tal como PUNTAL vino reflejando desde que se inició el juicio en la Cámara Segunda del Crimen, la mujer sentada en el banquillo tiene 20 años y cuando sucedió el hecho por el que está siendo juzgada tenía 18 y era madre soltera de dos bebés.

Ponces está acusada de homicidio calificado por el vínculo porque entre la noche del 22 y la madrugada del 23 de diciembre de 2016 dejó a su beba de apenas tres meses en una zanja de desagües donde la criatura falleció por sumersión.

Sin dudas sobre la autoría del hecho, lo que los jueces técnicos Pablo Bianchi, Carlos González Castellanos y Emilio Andruet deberán determinar junto a los jurados populares es si la joven madre debe ser condenada a prisión perpetua tal como prevé el Código Penal para este tipo de delitos, o existieron elementos que puedan atenuar una pena que, en el caso particular, aparece como excesiva.

Precisamente, al inicio del juicio la abogada defensora Luciana Casas se dirigió a los jurados populares y les recordó que, en momentos en que se debate arduamente sobre la posibilidad de despenalizar el aborto, aparece desproporcionada la pena que la ley prevé para los casos de infanticidio.

En opinión de Casas, la llave para llegar a una decisión justa es contemplar las dificultades por las que atravesaba Rebeca Ponces, su situación de extrema soledad y la falta de asistencia y contención de parte de los padres de las criaturas y de su propia madre.

Un dato que llamó la atención hasta de los propios jueces técnicos fue la ausencia de los padres de Rebeca o de sus hermanos en el juicio que puede determinar el futuro de la joven.

Detenida desde aquella trágica noche de diciembre de 2016, Ponces  hace meses que no recibe visitas en la cárcel local. Su madre nunca fue a verla en prisión ni le facilitó el contacto con su pequeño hijo, que quedó bajo custodia de la abuela.

“No quiero adelantar conclusiones, pero lo que ha surgido en el juicio es una extrema vulnerabilidad, no sólo por la condición de soledad en que se encontraba Rebeca, con dos chiquitos a cargo, sino también por su edad. Aun así, terminó las últimas materias libres en el colegio, a sus hijos los quería y los cuidaba. Me parece que son circunstancias para tener en cuenta, junto a su personalidad”, recalcó Casas.

FUENTE: Diario Puntal

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