Desde NADia destacan los alcances de este equipo menos invasivo para los más pequeños y adultos mayores. Dicen que es difícil conseguirlo por trabas de las obras sociales y falta de actualización del PMO.
En la promoción de los avances en tratamientos contra la diabetes, desde la asociación civil NADia dan a conocer aquellos instrumentos que hacen más fáciles los controles y menos invasivos para las poblaciones vulnerables. En este sentido, han destacado la difusión de un sensor que reduce los pinchazos para mediciones de glucosa.
En diálogo con PUNTAL, la presidenta de la ONG, Nydia Farhat, hizo referencia a los sensores “Freestyle libre”, un dispositivo que ha mejorado la calidad de vida fundamentalmente en niños y adultos mayores. No obstante, alertó sobre las dificultades que tienen para acceder a esta nueva tecnología por las limitaciones que imponen las obras sociales y la demora en su inclusión del PMO por parte del gobierno nacional.
“Se utiliza un nuevo dispositivo, que se presenta en formato de parche y que tiene sensores para pasar por la piel y conocer los niveles de glucosa”, explicó la referente de la ONG de salud y agregó: “Lamentablemente aún no se pueden dejar del todo los pinchazos diarios, son necesarios para hacer lecturas comparativas porque estos sensores no son perfectos”.
Farhat aseguró que, de todas formas, estos sensores sirven para “tener una orientación de la situación del paciente y son de gran utilidad a la hora del trabajo con niños o ancianos, especialmente los niños por el uso durante el horario escolar”.
– ¿Cómo es la relación con las obras sociales en cuanto al acceso del dispositivo?
– Las obras sociales no lo están cubriendo, en especial Apross, pero la relación costo-beneficio es mucho mejor, porque en vez de tener que utilizar 5 cajas de tiras reactivas por mes se pasa a sólo una si se tiene el lector con los sensores. Es un dispositivo que cuesta $ 1.200 y cada sensor sale lo mismo (el lector se compra una sola vez y los sensores se cambian cada 15 días). En un primer mes se inicia con $ 2.400, pero cada caja de tiras reactivas sale aproximadamente $ 1.300, por lo que multiplicadas por 4 no es conveniente para las obras sociales.
Como si esta dificultad que imponen las obras sociales y prepagas fuera poco, desde NADia detallaron que, debido a que desde la Nación se sigue demorando la actualización del PMO (Programa Médico Obligatorio), aún no se incluyó el dispositivo en lo reglamentario y no se entregan desde el Estado ni se autoriza a las obras sociales la prestación.
– ¿Ya hay pacientes con diabetes en nuestra ciudad que utilizan el sensor?
– Sí, más allá de las trabas de las obras sociales, mucha gente ya lo está utilizando en Río Cuarto y es un gran alivio para cuando las maestras, por ejemplo, no pueden pinchar a los niños y les pasan el lector por el brazo.
– ¿Se puede conseguir aquí esta nueva tecnología?
– Se consigue en Río Cuarto, pero la mayoría lo compra por internet. La asociación civil NADia es intermediaria con el laboratorio que lo fabrica, por lo que se les respeta a los pacientes el precio original.
FUENTE: Diario Puntal
