La cifra surge de la declaración impositiva que la empresa del grupo Roggio presentó en la Municipalidad. En la primera mitad del año se llevaron 19,5 millones en promedio por mes y aportaron apenas 741 mil pesos en concepto de tasas locales.
Las tragamonedas se llevan una fortuna todos los días de Río Cuarto. Según los números que la propia Cet, integrante del grupo Roggio, le presentó al Municipio, en los primeros seis meses del año aspiró 650 mil pesos por día. Pero, de manera efectiva, sólo le devolvió a la Municipalidad en concepto de impuestos una cifra insignificante: 24.708 pesos.
El dato surge del informe de ejecución trimestral que elabora la Secretaría de Economía y que contempla tanto los ingresos como los gastos del Municipio. En uno de los ítems está especificado el aporte de Cet. En los primeros seis meses del año, la empresa de juego aportó 3.199.234 pesos en concepto de impuesto municipal del actual ejercicio. Y sumó 1.248.281 pesos del ejercicio anterior (en enero paga sobre lo recaudado en diciembre).
Esa cifra ni siquiera representa un cuarto de lo que Cet se lleva en un mes. Los 4,4 millones de pesos que le tributó a la Municipalidad significan el 22,8 por ciento de la recaudación que la sala de juegos consigue en un mes.
Si se promedia la facturación de Cet, tuvo en la primera mitad de este año ingresos promedio de 19.500.000 pesos. Pero, a la vez, el impuesto que le pagó a la Municipalidad fue de apenas 741.250 pesos por mes.
El contrato original que se firmó antes de que comenzaran a funcionar las tragamonedas estableció que la Municipalidad de Río Cuarto puede recibir sólo el 4 por ciento de lo que recaudan las máquinas.
Los 4,4 millones de pesos que aportó Cet en seis meses son insignificantes si se tiene en cuenta que en el mismo período el Estado local registró ingresos totales por casi 1.200 millones de pesos. Significa apenas el 0,36 por ciento de los recursos de que dispuso el gobierno de Juan Manuel Llamosas.
En las últimas semanas la discusión sobre el efecto de las tragamonedas se reinstaló en la ciudad. Primero, a partir de las cifras de facturación de Cet que publicó Puntal y, después, por la primicia también de este diario, que reveló que la Corte Suprema de Justicia de la Nación había desestimado el planteo del Municipio para poder regular el horario de las slots.
Esta semana, el bloque de concejales de la oposición se reunió con los integrantes del Consejo Económico y Social para pedirle a ese organismo que realice estudios económicos y sociales para dimensionar el impacto real del juego en Río Cuarto. El bloque de Cambiemos viene sosteniendo que en ninguna otra de las 17 ciudades que tienen un casino de y Biggest Sport Betting Site Judi SBOBET Agen Bola el efecto es tan nocivo en magnitud de facturación.
Después del encuentro con el Consejo Económico y Social, el jefe del bloque de concejales de Cambiemos, Carlos Ordóñez, manifestó que su bancada está trabajando en proyectos ya no para limitar el funcionamiento de las tragamonedas sino, directamente, para prohibirlo.
“Estamos trabajando con nuestros asesores. No es sencillo porque el andamiaje jurídico que armó Unión por Córdoba es realmente importante pero creemos que es una iniciativa en la que hay que tratar de avanzar”, planteó Ordóñez.
Argumentó que, actualmente, el 70 por ciento de los riocuartenses rechaza la permanencia de las tragamonedas en la ciudad.
En 2009, el gobierno de Juan Jure intentó ponerle un límite horario a la sala de juegos de Cet: pasaría a tener una actividad de entre 14 y 15 horas diarias. Después de un largo debate, se votó una ordenanza. Sin embargo, no pudo aplicarse ni un minuto por la diligente actuación del Tribunal Superior de Justicia, que garantizó el horario pleno para la firma del grupo Roggio.