El Municipio aportará subsidios no reintegrables para poner en marcha micro-emprendimientos productivos para las 8 familias que se vieron involucradas en el operativo de Senasa en donde se decomisó y sacrificó a 86 cerdos, tras un brote de triquinosis.
El subsecretario de Desarrollo Social del Municipio, Pablo Bertea, manifestó que «después de varias instancias de diálogo con los vecinos que se habían visto afectados por el operativo, llegamos a un acuerdo con el cual todos estamos muy conformes».
Señaló que el Municipio intervino porque a pesar de las malas condiciones de los animales, «muchas de estas familias se quedaran sin su fuente de trabajo».
Después de todo un día de negociaciones, los vecinos de barrio Oncativo y los funcionarios del Municipio llegaron a un acuerdo por el cual continuarán con la producción porcina, pero en un lugar sanitariamente apto.
En este marco, el Municipio aportará subsidios no reintegrables para poner en marcha micro-emprendimientos productivos para las 8 familias involucradas en el caso.
“El acuerdo implica que habrá micro-emprendimientos para la cría de los chanchos dentro de lo que es el ámbito normativo para este tipo de actividad. Los vecinos van a seguir produciendo cerdos, pero ya no en el barrio, porque el problema que hay es el basural”, explicó el subsecretario de Desarrollo Social del Municipio, Pablo Bertea.
El Municipio controlará la producción a través de las áreas de bromatología y zoonosis del Edecom.
Bertea precisó que los montos de los subsidios que se les entregarían a las familias se evaluará con lo que soliciten los afectados. Más allá del importe señaló que lo importante es generar un nuevo espacio para que desarrollen su actividad.
El subsecretario de Desarrollo Social puntualizó que la solución consiste en el otorgamiento de subsidios no reintegrables para micro-emprendimientos, que busca compensar los bienes y la fuente de ingresos que perdieron las familias.
