Lo decidieron los vecinos y lo van a comunicar al Municipio por nota formal. Dicen que así compensan los arreglos que están pagando por su cuenta. Aseguran que hace meses no ven a la empresa Incisa.
Los vecinos de barrio Castelli decidieron dejar de pagar la cuota del plan municipal de vivienda, aun a riesgo de sufrir consecuencias legales. Lo hacen a modo de protesta, por la falta de respuestas a los problemas de las casas. El mismo grupo de adjudicatarios ya había planteado públicamente los inconvenientes que sufren: rajaduras, humedades, filtración de agua desde el piso y otras. Pese a que el titular del área de Vivienda, Alejandro Bongiovanni, prometió soluciones para los primeros días de septiembre, ellos tomaron la decisión de suspender el pago.
Adjudicatarios del Plan Mil Viviendas Clase Media hicieron pública su determinación de dejar de cumplir con su parte del contrato que los vincula con el Municipio.
Esta semana enviarán una nota dirigida al subsecretario de Vivienda, Alejandro Bongiovanni, para informarle, entre otras cosas, que suspenden el pago de las cuotas.
“Han sido de público conocimiento las fallas estructurales que presentan nuestras casas y dichos reclamos han llegado a su secretaria, siendo el señor Bongiovanni el receptor en persona de los mismos, y ante la falta de ejecución de las soluciones prometidas, nos hacemos presentes con la finalidad de que éstas no se dilaten en el tiempo, dado que en algunos casos es imposible habitarlas”, puntualiza el texto.
En otro de los apartados del documento cuestionan el procedimiento que utilizó la Municipalidad para determinar el aumento en el valor de las cuotas, que en la actualidad alcanzan los 6.500 pesos por mes.
“Las cuotas han tenido un incremento de gran impacto económico y dicha modificación obedece a una ordenanza de la cual no fuimos notificados fehacientemente y pedimos la explicación correspondiente”, precisan en la nota que enviarán al responsable de Vivienda.
“Medida de resguardo”
“Debido a los problemas en nuestras viviendas, dejaremos en suspenso el pago de las cuotas, hasta que la situación de las mismas sea normalizada a razón de los reclamos y previniendo que tendremos que hacernos cargo de los arreglos. Consideramos que es una medida de resguardo por el injusto proceder de quien depende la atención y garantía que hoy nos lleva a pasar por esta problemática”, concluye el texto.
A mediados de julio, tras las quejas de los vecinos de barrio Castelli, el subsecretario de Vivienda, Alejandro Bongiovanni, prometió que las soluciones demorarán 45 días.
En esa oportunidad, también dejó en claro que, para el Municipio, no hay falencias estructurales. El funcionario detalló que la empresa Incisa viene haciendo reparaciones y que el área a su cargo controla esas obras.
Discrepancia
Sin embargo, los adjudicatarios insisten en que eso no tiene nada que ver con la realidad y aseguran que la constructora no está llevando a cabo ningún tipo de reparación. «No vinieron nunca más. Antes se habían llegado para hacer los arreglos, pero la verdad es que quedaban peor que antes. Y ahora se borraron. La camioneta de Incisa no se ve hace meses y las reparaciones las tenemos que hacer por nuestra cuenta», dijo Lucrecia Gamba, vecina del barrio.
FUENTE: Diario Puntal
FUENTE: Diario Puntal
