En la jornada del sábado, funcionarios municipales -encabezados por el intendente Juan Manuel Llamosas- e integrantes de diferentes agrupaciones políticas, sociales y barriales, participaron de una jornada de trabajo voluntario para dar vida a la Casa del Sol, espacio de contención y ayuda a los niños más necesitados.
Como si se hubiesen contagiado por el trabajo que, desde hace tiempo, realiza el partido Respeto del concejal Pablo Carrizo, decenas de personas pusieron manos a la obra para intervenir en el lugar, con pequeñas obras pero grandes expectativas para el futuro de un centro que brinda talleres culturales, deportivos y educativos, al cual asisten más de 80 niños.
«Vamos a tratar de fortalecer en la medida al voluntariado para que el vecino tenga una participación activa en las necesidades de la ciudad», señaló el intendente municipal, quien recorrió las instalaciones junto a sus funcionarios e integrantes de diferentes agrupaciones.
Carrizo también participó de las tareas junto a los integrantes de Respeto, lo que sumó a la mano de obra que, en un principio, solo iba a limitarse al pintado de las paredes del lugar y que con la colaboración de más gente pudo extender sus tareas a las refacciones exteriores e interiores.
