El vicegobernador de la provincia de Córdoba, Martín Llaryora, estuvo en Cura Brochero junto a 30 mil peregrinos siguiendo por pantalla gigante la ceremonia de santificación del Cura Gaucho, que se transmitía desde el Vaticano.
Desde la noche del sábado hasta la mañana del domingo, Llaryora dijo presente en la vigilia de oración por la canonización del primer santo argentino. El Vicegobernador visitó la iglesia –donde asistió a la misa- y estuvo en el predio desde el que, acompañado por más de 30 mil fieles, siguió la santificación del sacerdote cordobés José Gabriel del Rosario Brochero (1840-1914), a través de pantallas gigantes que emitieron las imágenes desde la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.
“Hoy es un día de estricta justicia. Que nuestro ‘curita gaucho’ hoy sea santo es virtud de su obra, porque uno lo siente hasta casi presente, su obra está viva. Fue un cura que evangelizó pero, a la par, generó desarrollo. Cuando vino acá, no estaban desarrollados los caminos y peleó por los caminos. Sabía que su pueblo necesitaba educación, y peleó por la educación”, aseguró Llaryora, quien valoró, además, el trabajo por el turismo que realizó el santo Brochero: “Fue uno de los que impulsó el abrir casas de huéspedes, más allá de lo que hizo en cuanto a ampliación de iglesias, capillas, etc. En la zona de Traslasierra, la principal fuente de ingreso es el turismo, y romper la estacionalidad es lo más difícil. Y ahora, con el turismo religioso, se logra esa posibilidad. En la iglesia veíamos gente de Paraguay y de otros países”.
Asimismo, el Vicegobernador indicó que “por su imagen, por su carisma, por su obra” Brochero se convertirá en “uno de los santos más importantes del mundo”.
