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Una riocuartense testigo de un milagro en la celebración por Brochero

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Mariana Lencina, una mujer riocuartense que manifestó que tuvo su hijo gracias un milagro de Cura Brochero, fue quien llevó las ofrendas en la misa de acción de gracias por la santificación del cura gaucho José Gabriel del Rosario Brochero, que se llevó a cabo este sábado y que contó con la participación de miles de fieles.

“Con mi marido somos brocherianos y cuando el padre nos propuso formar parte de la misa para nosotros fue una bendición. Una gracia muy importante”, contó a Primero Noticias la riocuartense que participó de la celebración realizada en el predio de La Providencia de Villa Cura Brochero.

Mariana Lencina se mostró muy emocionada por todo lo vivido. “Nosotros participamos de la beatificación también”, contó Mariana, quien manifestó que su hijo es producto de un milagro brocheriano: “fue algo muy emocionante porque (tiempo atrás) habíamos ido a pedir ser papás y el sábado mi hijo de tres años y medio fue quien llevaba las intenciones. Verlo caminar al altar fue algo muy maravilloso, fue un regalo y un mimo de Brochero”, expresó Lencina.

La feligresa riocuartense dijo que esto es producto de la fe, “es creer en Dios porque él es el que hace los milagros y tenemos personas santas como Brochero que son las que interceden para que esos milagros se concreten”.

También recordó que “el año pasado llevamos a mi ahijada y cuando volvimos, mi hermana le repitió los estudios y gracias a la intersección de Brochero le dieron todos bien”.

La brocheriana Mariana Lencina dijo que la santificación del cura gaucho “es un regalo para la Argentina, un santo nacido y fallecido acá en un momento en el cual la gente necesita estar cada vez más cerca de Cristo”.

La celebración

«Esta fue la primera misa en Traslasierra con los restos del Cura Brochero ya santo, y con la peregrinación por las calles de nuestro pueblo damos gracias por la canonización con toda nuestra gente festejando» por el acontecimiento que significa tener un santo cordobés, dijo Monseñor Santiago Olivera.

En el predio, colmado por fieles de la zona y provenientes de distintos puntos del país, los creyentes compartieron emoción y devoción, rogando al «pastor de estas tierras que ya es popularmente conocido como el Santo Cura Brochero, el protector de los pueblos, el amigo de todos, el que intercede para el desarrollo de los pueblos, el cura criollo, el cura de las gauchadas», expresó Olivera.

Villa Cura Brochero es una población de unos 8.500 habitantes, que este sábado pasado resultó desbordada por la masiva afluencia de peregrinos llegados de los tres principales lugares de referencia brocheriana en la zona centro: la Parroquia, la casa donde vivió y murió, y el museo.

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