Se ha transformado en una tradición de comienzo de clases. Pese al paro del 6 y 7 de marzo centenares de jóvenes se llegaron a la plaza central de la ciudad aproximadamente a las 4 de la mañana y extendieron su festejo hasta las 7.30 que se desplazaron hasta Plaza Olmos.
Pirotecnia al por mayor, bebidas alcohólicas de todo tipo, banderas con cada una de las promos fue el corolario de un festejo que levantó polémica entre los transeúntes.
Trabajadores municipales comentaron que encontraron rota una fuente y que hace unos días se había retirado los picos que en temporadas anteriores habían sido objeto de desmanes.