En el último tiempo, se está instalando una nueva forma de robo consistente en inhibir el encendido de la alarma del vehículo o de la casa mediante un dispositivo electrónico. En la tarde del lunes una vecina de la ciudad radicó una denuncia por un intento de robo a su vehículo.
Una mujer que había dejado estacionado su automóvil en el microcentro de la ciudad este lunes por la tarde denunció un intento de robo en el interior del mismo y la utilización de un inhibidor de alarma por parte del ladrón.
En la denuncia existente queda de manifiesto que no se lograron sustraer pertenencias personales del vehículo y que el ladrón, en tanto, logró ser ahuyentado por la propia propietaria.
Cabe destacar que los inhibidores de frecuencia son dispositivos electrónicos de tamaño reducido que, mediante la emisión de una señal, anulan la frecuencia de cualquier alarma de forma tal que evitan o interrumpen la comunicación entre el pulsador que lleva el vecino y la central que está escondida en el coche.
De tal manera, la víctima se va creyendo que activó el equipo y el rodado se encuentra a salvo, pero no es así.
Anulada la alarma, con llaves o ganzúas los ladrones fuerzan las puertas o baúles del vehículo y manotean lo que quieren.
De acuerdo a la información vertida desde la Unidad Departamental de Río Cuarto, se han registrado denuncias previas en la ciudad, sobre todo en playas de estacionamientos de supermercados utilizando elementos electrónicos fabricados en forma casera.
La fuerza policial recomienda a los vecinos que a la hora de activar el control remoto se controle de forma manual que haya sido activado en las puertas de los vehículos o bien en las viviendas.
