Los trabajadores del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) nucleados en ATE llevan a cabo un paro desde el pasado 6 de julio en reclamo de mejoras salariales, el pase a planta permanente de los contratados; el 82% móvil jubilatorio y terminar con la precarización laboral, entre otros ítems de importancia.
Las medidas de fuerza de quienes se encargan de realizar los controles sanitarios ya afecta la actividad frigorífica en todo el país y paraliza las exportaciones agropecuarias.
Federico Giuliani, secretario general de ATE, aseguró que la medida de fuerza en la región es contundente. Además manifestó, que si no se establece un acuerdo este miércoles, la protesta podría fortalecerse y llegar a afectar el stock de carne en las góndolas de los supermercados.
