Tres policías fueron baleados hoy en Baton Rouge, Louisiana, donde la muerte de un hombre negro a manos de la policía a comienzos de mes causó una ola de indignación y protestas. Otros tres policías están heridos de manera grave. A uno de los hombres que abrió fuego contra la policía habrían matado los agentes y otros dos cómplices habrían escapado.
El portavoz de la Policía de Baton Rouge, Don Coppola, indicó al canal de televisión local WAFB, que «varios agentes fueron alcanzados por balas», sin dar precisiones sobre las circunstancias del tiroteo.
El alcalde, Kip Holden, dijo a la misma cadena de televisión que, según la información disponible por ahora, los tres policías habían sido internados en estado de extrema gravedad y murieron allí.
El canal mostró imágenes de policías acudiendo al lugar del tiroteo en Baton Rouge. Múltiples disparos podían escucharse mientras automóviles particulares se alejaban rápidamente.
La muerte a tiros del vendedor ambulante negro Alton Sterling, de 37 años, a manos de la policía de Baton Rouge el 5 de julio había desatado airadas protestas y ahora es objeto de una investigación federal.
Dos días después, cinco policías que custodiaban una manifestación contra la violencia policial en Dallas (Texas) murieron baleados por un francotirador negro, elevando las tensiones raciales en Estados Unidos.
